– “Doctor, ¿dónde ha estudiado usted medicina?
– “En un curso de verano impartido por el Taller de Amigos de la Salud de Chinçhilla”
¿Te pondrías en sus manos?
¿Por qué no tenemos los mismos reparos con el Patrimonio Cultural?
Cursillos y talleres de restauración aptos para todos los públicos
Estos cursillos y talleres de restauración aptos para todos los públicos:
- Banalizan el valor del Patrimonio Cultural, rebajando su diagnóstico y tratamiento a una acción propia de talleres de manualidades.
- Desacreditan y distorsionan la profesión del conservador – restaurador, que es una carrera universitaria
- Son una estafa para unos alumnos que pagan por trabajar, con frecuencia en proyectos sin permisos de la autoridad competente.
- Además, los cursos no garantizan el trabajo en el futuro, puesto que la ley exige formación superior específica
- Son una competencia completamente desleal para el colectivo profesional de los conservadores – restauradores
Necesidades del Patrimonio Cultural
Nuestro Patrimonio Cultural necesita:
- Que lo valoremos como nuestra seña de identidad, como la herencia que hemos recibido y estamos obligados a transmitir a generaciones venideras.
- Que lo intervengan profesionales de la Conservación-Restauración de Bienes Culturales con formación oficial (en Universidades o Escuelas Superiores de CR) y experiencia acreditada.
Obligaciones con el Patrimonio Cultural
El artículo 46 de la Constitución encomienda a los poderes públicos la garantía de la conservación y la promoción del enriquecimiento del “patrimonio histórico, cultural y artístico de los pueblos de España, y de los bienes que lo integran”.